No en el sentido de rehabilitar a los desertores que se arrepienten y quieren entrenarse para ser unos verdaderos “discípulos y misioneros de Cristo”, sino de gente que se prepara para algún día volverse en verdaderos desertores.
Por el p. Flaviano Amatulli Valente, fmap.
Un auténtico fracaso
Se trata de un hecho a la vista de todos: los muchachos acuden a la catequesis, se preparan para recibir el sacramento de la confirmación para volverse en “soldados de Cristo” y después ¿qué pasa? Que ya no vuelven.
¿Hasta cuándo? Hasta que algún día no se decidan a casarse por la Iglesia. Entonces, para muchos se trata de un sacramento de despedida de la práctica de la vida cristiana o de un simple requisito para casarse por la Iglesia.
Teoría y práctica
¿Qué hacer, entonces, ante esta realidad, tan generalizada? Revisar todo el sistema de educación en la fe, juntando teoría y práctica. En realidad, para volverse en unos verdaderos “discípulos y misioneros de Cristo”, no es suficiente conocer la enseñanza de Cristo; es esencial entrenarse para vivir según el Evangelio.
Es lo que propone el texto “Ven, Espíritu Santo”, en que se señala la manera concreta de poner en práctica las Obras de Misericordia (espirituales y materiales), vivir la Santa Misa, participar en algún encuentro de oración con los grupos presentes en la parroquia, etc.
La Biblia como texto básico
Es otra novedad que propone el folleto “Ven, Espíritu Santo”: utilizar la Biblia como texto básico y todo lo demás como subsidio. Se trata, entonces, de una auténtica revolución en el campo catequético, poniendo la Palabra de Dios al centro de todo, una Palabra, sin duda, “viva y eficaz” (Heb 4, 12).
Al mismo tiempo, precisamente teniendo en cuenta la Palabra de Dios, se proponen los contenidos básicos de nuestra fe: el amor de Dios, Cristo como nuestro único Salvador y Señor, el papel del Espíritu Santo en nuestra vida, la importancia de pertenecer a una pequeña comunidad cristiana para vivir la fe en plenitud, etc. Como es fácil notar, se trata de una auténtica aventura en el Espíritu.
Hagan la prueba
Como nos amonesta la Palabra de Dios, “hagan la prueba” (Sal 34, 9) y se darán cuenta personalmente de la urgencia de un cambio tan trascendental en nuestro sistema de catequesis, con miras a formar a verdaderos católicos y no a católicos de pantalla.
Ya muchos están utilizando el texto “Ven, Espíritu Santo”, ya traducido a distintos idiomas, con resultados sorprendentes. Hagan la prueba. Les garantizo que no se arrepentirán.
Nota:
El precio normal del texto para la Confirmación “Ven, Espíritu Santo” es de $45.00 (pesos mexicanos).
Habrá el 40% de descuento para los que lo adoptan oficialmente.
Padre, usted dice que: «se preparan para recibir el sacramento de la confirmación para volverse en “soldados de Cristo” y después ¿qué pasa? Que ya no vuelven». En realidad, la gran mayoria de los jovenes hoy en Dia, no llega a realizar la confirmacion, se quedan en la primera comunion..y….despues que pasa? que ya no vuelven como dice usted, hasta que se quieran casar. Entre la primera comunion y el casarse por iglesia, suele haber unas cuantas idas a la Misa los domingos, presente de cuerpo y ausente de espiritu. De esa manera, el catolico nunca conoce la fe catolica, ni los sacramentos, ni nada de eso, y lo que es peor….nunca llega a sentir la palabra de Dios, por que? por que lamentablemente, la gran mayoria de los sacerdotes, no saben transmitir la palabra, no saben hacer homilias ni sermones, para que le lleguen al creyente y de esta manera viva y sienta la palabra de Dios. La iglesia debe hacer un esfuerzo grande en mejorar la formacion de sus sacerdotes, para que sepan evangelizar y catequisar, son muy pocos y contados, los sacerdotes que saben hacerlo. La vida del catolico pasa del bautismo a la primera comunion, de ahi a unas o muchas idea a la misa sin sacar problecho de ella, luego casamiento por iglesia, por simple tradicion y luego bautismo de sus hijos….y el ciclo continua, sin nunca haber vivido y sentido la palabra de Dios. HAy que hacer que llegue la palabra, para que el catolico se convierta realmente, y no pasa toda su vida en simple ritos tradicionales por costumbre o tradicion.
Estimado Rodrigo:
Tiene usted mucha razón.
Es vital que haya un nuevo estilo de catequesis. En relación a la Primera Comunión y a la Primera Confesión es muy útil nuestro libro «Pan de Vida».