Lo que pasa en el campo económico lo mismo está pasando en el campo religioso: mismas reglas, mismo estilo y mismos ritmos para todo. Y los más pobres pagan el pato.

Estimado P. Amatulli:
Lo felicito por su valor en enfrentar el problema de las sectas, En efecto, he leído algunos libros de Usted y me han sido de suma utilidad.
Una cosa no entiendo: ¿Por qué son tan pocos los sacerdotes que hablan y escriben como Usted? Aquí en Sao Paulo (Brasil), donde me encuentro por motivos de trabajo, todos dicen que hay que dialogar con los de otra religión, ir a su templo, etc. ¿ Y qué pasa? Que muchos compañeros de trabajo han seguido este consejo y se han pasado con las sectas: testigos de Jehová, mormones, pentecostales, adventistas del séptimo día, etc.
¿Por qué hay tanta confusión en la Iglesia?
Alfredo Acuña L. Sao Paulo, Brasil.

Son los efectos de la globalización, Visto que el Papa se abraza, ora y dialoga con gente de otras creencias, uno también quiere hacer lo mismo con la diferencia que el Papa está muy bien preparado y sabe con quién se abraza, ora y dialoga, mientras la mayoría de los católicos no están preparados y no conocen la manera de pensar de los demás. En realidad en los asuntos de la religión no todo es color de rosa. Solamente algunos grupos religiosos aceptan el diálogo y están buscando la manera de hacer realidad el sueño de Cristo que quiere la unidad (In 17,21) (Ortodoxos, anglicanos, luteranos, metodistas, etc.). Mientras hay otros grupos decididamente proselitistas, es decir que buscan la manera de conquistar a los católicos (testigos de Jehová, mormones, pentecostales, adventistas del séptimo día, etc.)
Se trata de grupos diferentes, con actitudes diferentes, y por lo tanto de parte nuestra tiene que haber una actitud diferente hacia ellos: dialogar con los que dialogan y estar preparados para defender nuestra fe con relación a los que la atacan y tratan de matarla, inyectando en nuestro corazón la desconfianza, la duda y hasta el odio.
¿Por qué entonces, en lugar de ayudar al católico a fortalecer más su fe, se le invita a lanzarse hacia un diálogo para el cual no está preparado? Y ahí están las consecuencias: muchos se dejan convencer por las sectas y se adhieren a ellas.
Como decía antes, se trata de los efectos de la globalización: se quiere utilizar la misma receta para todas las circunstancias. Este sistema como está causando problemas en el caso económico, lo mismo está haciendo en el campo religioso.
Y los pobres son los que siempre pagan el pato, es decir que sufren las consecuencias, a nivel económico, cultural y religioso. Ojalá que hubiera más respeto por los más pobres y débiles, a todos los niveles.