Biblia y diálogo: un binomio inseparable
para formar auténticos matrimonios católicos.

Los Apóstoles de la Palabra estamos trabajando desde hace algún tiempo en la preparación presacramental: el Bautismo, la Confirmación, la Confesión, la Primera Comunión y el Matrimonio.
Queremos que los que vayan a recibir algún sacramento estén totalmente conscientes de lo que van a recibir, y tengan un compromiso cristiano.

Dinámicas de conocimiento
En el caso del sacramento del matrimonio, buscamos que los futuros esposos (y aún los que ya lo son) se conozcan plenamente, utilizando el diálogo personal como medio.
Durante los encuentros se realizan algunas dinámicas de conocimiento, utilizando el folleto “Un pacto de amor”. Normalmente en las pláticas prematrimoniales es una persona quien da las charlas y los novios son quienes escuchan. En nuestro caso, son los esposos o novios los que hablan entre sí. Algo extraordinario en muchos casos, pues algunas parejas no están acostumbradas a platicar temas tan simples pero a la vez importantes que ayudan a conocerse y a comprenderse mutuamente.

Palabra de Dios
Además, no puede faltar la intervención de la Palabra de Dios para iluminar las distintas situaciones. Con un abundante uso de la Biblia se dan algunas reflexiones, aplicándolas a la vida matrimonial. En realidad, la Sagrada Escritura da muchas respuestas a los problemas que comúnmente surgen en el matrimonio.
Después de tomar conciencia de las fallas que existen en el matrimonio, se llega a una reconciliación con Dios y con la pareja. Los matrimonios hablan entre sí para pedirse perdón, después de haber pedido perdón a Dios. Es entonces cuando algunos de los participantes públicamente dan su testimonio y piden perdón a Dios por las ofensas cometidas. La Sagrada Eucaristía con Biblia concluye el evento.

Asesores matrimoniales
Después de esta experiencia, algunos matrimonios dan un paso más, comprometiéndose a seguir con este apostolado en sus parroquias. Ellos ayudarán a otras parejas, siendo asesores matrimoniales, una figura que queremos promover más en la Iglesia, para favorecer el surgimiento de auténticos matrimonios católicos.
Hasta la fecha se han dado este tipo de encuentros en Puebla, Tehuacán, Acapulco y México, DF. Si algún párroco está interesado en este tipo de pastoral, solicite nuestro apoyo y se lo ofreceremos con gusto.