Por el seminarista Imeldo Martínez Reyes
Se realizó el primer encuentro de catequistas para proponer el modelo CIDECAP (Camino Integral de Catequesis Apóstoles de la Palabra). En Santa Catarina Tláhuac del 30 de junio al 6 de julio 2019. Esta semana del catequista fue organizada por el Departamento de catequesis, cuya coordinadora nacional es la hermana Reyna Reza Pizar, y con el apoyo de algunos integrantes del departamento de música, de pastoral bíblica y la colaboración de algunos seminaristas.
En este evento participaron personas provenientes de E.U, Oaxaca, Hidalgo, Veracruz, Guerrero, Puebla, el Estado de México y la Ciudad de México y fue posible gracias a la colaboración de muchas personas, que generosamente dieron su tiempo y aportación material.
Cabe destacar la participación del Padre Pascual Pérez Rodríguez quien nos acompañó en este evento como expositor de la parte doctrinal y presidente de las celebraciones de la Santa Misa, de Paola Yazmín Santos Reza, quien es originaria de Xoxocotla Morelos y nos impartió el taller sobre “Cuenta Cuentos”, ofreciéndonos técnicas para contar historias bíblicas y demás narraciones relacionadas con la evangelización. También fue de gran importancia el taller sobre actuación y obras de teatro impartido por José Alberto Mancilla Valencia y su equipo.
La formación se desarrolló a partir de 7 dimensiones, Bíblica, Apologética, Doctrinal, Pastoral, Humana, Pedagógica, Espiritual. En un ambiente ameno de Oración, formación doctrinal, juegos de repaso, dinámicas, concursos bíblicos, memorización y revisión del material escrito por nuestro padre fundador el Padre Flaviano Amatulli Valente sobre el sacramento de la primera comunión y nociones sobre la catequesis pre-sacramental en general.
Nos sentimos muy agradecidos con el Señor por esta oportunidad, que nos abre las puertas hacia la catequesis y la consolidación de un nuevo departamento en nuestra familia misionera Apóstoles de la Palabra.

DIMENSIONES DE LA CATEQUESIS
Modelo CIDECAP
1.- Dimensión Bíblica. Esta dimensión nos tiene que mover la conciencia en vistas a reconocer el grande valor que tiene la Palabra de Dios y su mensaje de Salvación para su pueblo. Ahora todos tenemos acceso a las Sagradas Escrituras y por ello no debe de quedarse al margen, antes bien, debe de estar en el centro de todo nuestro ser y quehacer eclesial. El P. Amatulli lo expresaba de la siguiente manera «“Biblia para todos y Biblia para todo, todo con la Biblia y nada sin la Biblia” su gran anhelo fue siempre que toda nuestra vida estuviera iluminada por la Palabra de Dios y más aún la labor evangelizadora que la Iglesia realiza. En la catequesis pre-sacramental se debe luchar por tener como punto de referencia, la voz de Dios transmitida en la Biblia. A ello se puede llegar por medio de herramientas a las que llamamos subsidios o materiales previamente preparados.
2.- Dimensión Apologética. Cómo objetivos de esta dimensión están los siguientes: garantizar la permanencia de los católicos, fortalecer su fe, darle seguridad y herramientas para discernir en medio de un mundo plural, secular, y proselitista, donde por medios lícitos e ilícitos se intenta conquistar a los miembros de la Iglesia, que descuidados en la formación de su fe, se dejan engañar con facilidad. Es necesario tener una identidad clara de nuestro ser católico, para que sin complejos ante nadie ni nada, podamos dar razón de nuestra esperanza, es decir de nuestra fe (1P 3,15), este saber dar razón de la propia fe, también es uno de los efectos del sacramento de la Confirmación CEC 1303. Discernir entre la Iglesia fundada por Cristo y todas las agrupaciones que han surgido antes o después, no es un lujo, sino que es un deber. No es cuestión de pleitear con nadie, sino de conocer y valorar, sin descuidar que cada uno es un promotor de aquello que se nos dio con un amor infinito.
3.- Dimensión Humana. No se trata de abandonarnos en manos de la sabiduría humana y concederle a la Psicología, el rumbo de la vida cristiana, sino de hacer uso de los recursos que Dios ha ido En esta dimensión los esfuerzos estarán encausados al conocimiento personal de cada uno de los que integren los grupos de la catequesis y a todos los que tengan un papel importante en el ambiente y formación de los mismos. Se utilizarán los recursos que aporta la ciencia de la psicología, en medida de lo posible; camino que puede profundizarse cada vez más, ya que el conocimiento de la persona involucra muchos factores internos y externos.
4.- Dimensión Espiritual. La “fe” difiere del aspecto sentimental, por ello es necesario que los candidatos tengan una fuerte experiencia de Dios en su recorrido formativo, para que ellos se sientan en la necesidad de transmitir, no solo sus conocimientos, sino la cercanía de Dios, que es nuestro Padre. Es cierto que la fe se aprende en casa, pero también la catequesis es un lugar que debe estar impregnada de un ambiente espiritual y en este ambiente el o la catequista son los padres y maestros en la fe. No basta con un retiro que se viva sino que es necesario todo un proceso,
5.- Dimensión Pastoral. Toda la fuerza de la catequesis pre-sacramental se orientará hacia la acción evangelizadora, ya que todos hemos sido llamados para ir por todo el mundo y anunciar la Buena Nueva (Mc16-15). Todos los bautizados, incorporados ya a la Iglesia, que es el Cuerpo Místico de Cristo, recibimos una llamada especial para ser luz, sal y levadura en medio de este mundo y con esta conciencia recorremos el camino formativo pre-sacramental, de tal marea que toda la formación se convierte en un medio para servir a los demás y para ser obreros de la mies del Señor.
6.- Dimensión Doctrinal. Las verdades de la fe cristiana son fundamentales en el conocimiento de la revelación y no deben olvidarse, por ello su enseñanza debe de hacerse con sencillez, con un lenguaje accesible para todos, y que tome de la fuente, es decir, de los documentos de la Iglesia, del Concilio Vaticano II y del Catecismo de La Iglesia Católica, sin olvidar las líneas generales del Carisma que como Apóstoles de la Palabra hemos recibido y que distribuido en los libros de nuestro padre fundador y en la experiencia de toda la comunidad nos guía, alienta e instruye.
7.- Dimensión Pedagógica. Esta dimensión esta iluminada por: tablas de juegos bíblicos, los concursos bíblicos presentados en el folleto “aprender la biblia jugando”, los mismos folletos utilizados como subsidios en la catequesis para la primera comunión y la confirmación, juegos de repaso, dinámicas, cantos, obras de teatro, declamación de salmos, la fiesta de la biblia, representación de los santos, entre otros. La catequesis, es un espacio donde la fe se aprende en un clima espiritual y en un ambiente de alegría, por ello cada agente de la catequesis ha de volverse en un verdadero maestro de la evangelización, no se trata de actividades solamente lúdicas, sino que además, cada actividad será pensada para reforzar el contenido visto en la sesión de catequesis.